La falta de actividad física afecta su salud mental y aumenta el riesgo de enfermedades crónicas. Conozca algunas indicaciones para comenzar a moverse hoy mismo.
El día 10 de marzo se celebra el Día Mundial del Combate al Sedentarismo. La fecha fue elegida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para concientizar a la población sobre las graves consecuencias de la falta de actividad física e incentivar prácticas que mejoran la calidad de vida y previenen diversas enfermedades crónicas, incluyendo el cáncer, la enfermedad de Alzheimer, hipertensión, infarto y diabetes.
Según la OMS, hasta el 2030, 500 millones de personas corren en riesgo de enfermarse si continúan llevando una vida sedentaria. Por eso, ARM lo invita a cambiar sus hábitos hoy mismo.
La reducción de los niveles de actividad física entre la población mundial ha generado una epidemia de sedentarismo, resultando en un problema grave de salud pública responsable por dos millones de muertes cada año (OMS). A pesar de que generalmente se piensa en los riesgos del sedentarismo para la salud física, como hipertensión, diabetes, obesidad y enfermedades cardiovasculares, el impacto de los hábitos sedentarios en la salud mental puede ser igualmente avasallador, resultando en baja estima, distorsión de la autoimagen, depresión, aumento de ansiedad y estrés, además de ampliar el riesgo de desarrollar enfermedades como el mal de Alzheimer.
Diversos tipos de cáncer están asociados al comportamiento sedentario y a la falta de actividad física, incluyendo el cáncer de mama, de colon (intestino grueso) y de esófago.
¿Cómo combatir el sedentarismo?
Mantener el cuerpo saludable es esencial para su buen funcionamiento, así como cualquier máquina que necesita cuidados y mantenimiento. La práctica regular de ejercicios y una alimentación saludable son fundamentales. Sin embargo, si usted es sedentario desde hace mucho tiempo, es importante que tenga cuidado al decidir cambiar los hábitos. En primer lugar, es recomendable que usted haga un control médico. De esa forma podrá identificar posibles enfermedades y evaluar qué actividades físicas son más apropiadas para su rutina, como también con qué intensidad y frecuencia debe realizarlas.
Chau sedentarismo
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, abandonar el sedentarismo no exige mucho tiempo. Con tan solo 150 minutos por semana de actividades físicas aeróbicas moderadas, como caminar, correr, nadar, jugar vóley, básquet, andar en bicicleta o comenzar a practicar ejercicios en un gimnasio combinando actividades aeróbicas con musculación. Sin embargo, es importante mantener la regularidad en los ejercicios durante la semana para obtener beneficios a la salud. O sea, no es de provecho ser un atleta de fin de semana. Para dejar el sedentarismo atrás es necesario dedicar tiempo a la práctica de ejercicios físicos por lo menos tres días a la semana.
Consejos
Aquí damos algunos consejos para que los ponga en práctica cada día.
- Recuerde pasar por una consulta con un médico clínico general u otro médico de su confianza antes de comenzar a ejercitarse, solo para evaluar sus condiciones de salud.
- Practique algún ejercicio físico que se adapte a su estilo de vida y que le guste. Pequeñas modificaciones en la vida diaria, como subir escaleras, descender del ómnibus una parada antes, pasear con la mascota y barrer la casa, ayudan a mover más el cuerpo y pueden servir como un estímulo para el inicio de una actividad física diaria con una duración más extensa.
- Si lo prefiere, haga 30 minutos por día, cinco veces en la semana, de ejercicios físicos de intensidad moderada. Caminata a ritmo acelerado, hidro gimnasia o bicicleta, por ejemplo, son suficientes para abandonar el sedentarismo. Esos 30 minutos pueden ser continuos o divididos en hasta tres períodos de diez minutos cada uno.
- Realice alongamiento antes y después de la actividad.
- Comience despacio y vaya aumentando la intensidad gradualmente. De esa forma previene el riesgo de sufrir alguna lesión.
- No haga ejercicios físicos en ayunas. Antes de comenzar la actividad, consuma una porción de carbohidrato, que puede ser una fruta o una rodaja de pan con mermelada.
- Hidrátese antes, durante y después de los ejercicios.
- Use ropa y zapatillas adecuados.
- Esté atento al surgimiento de cualquier síntoma durante y después de la práctica deportiva, y busque un médico.
Recuerde siempre elegir un ejercicio físico que le guste y que se adapte a su estilo de vida. De lo contrario serán muchos los motivos para desistir.